El relator especial del organismo, Maina Kiai, advirtió especialmente sobre el comportamientos de los Carabineros y a las Fuerzas Especiales y expresó su «preocupación por su desempeño en las manifestaciones de protesta».
El relator especial de la ONU sobre el derecho a la libertad de reunión y asociación, Maina Kiai, instó hoy al gobierno de Chile a eliminar “los vestigios de la dictadura” que socavan la libertad de reunión pacífica en el país.
Al terminar su primera visita oficial a Chile, el experto reconoció que esa nación ha logrado grandes avances en materia de derechos humanos desde el retorno a la democracia hace 25 años.
“Sin embargo, aún persisten vestigios de antaño que no tienen cabida en el Chile de hoy. El fantasma de esa época acecha especialmente al sector de la seguridad en su función de custodiar los conflictos sociales y manifestaciones”, señaló Kiai en un comunicado.
«Aún persisten vestigios de antaño que no tienen cabida en el Chile de hoy. El fantasma de esa época acecha especialmente al sector de la seguridad en su función de custodiar los conflictos sociales y manifestaciones”.
El relator mencionó específicamente a los Carabineros y a las Fuerzas Especiales y expresó preocupación por su desempeño en las manifestaciones de protesta.
En su visita, recibió información de uso excesivo de la fuerza y acoso, además de otras violaciones cometidas por la policía durante esas movilizaciones.
El relator de la ONU, en Chile, recibió información de uso excesivo de la fuerza y acoso, además de otras violaciones cometidas por la policía durante movilizaciones.
Kiai citó con especial inquietud el caso de Nelson Quichillao, un trabajador minero muerto en julio de 2015 por un disparo de las Fuerzas Especiales en El Salvador durante una protesta laboral.
Las autoridades sostienen que la protesta no era totalmente pacífica, pero el experto recordó que “los individuos conservan en todo momento sus derechos a la vida y a la integridad física, aun si se tornan violentos durante las protestas, y es deber del Estado salvaguardar estos derechos”, subrayó.
Kiai llamó la atención sobre múltiples relatos –tanto de la sociedad civil como del gobierno– de que “agentes provocadores” con frecuencia irrumpen en protestas pacíficas de estudiantes y trabajadores, causando violencia y daños a la propiedad.
Las autoridades luego utilizan esta disrupción para justificar un mayor uso de la fuerza contra todos los manifestantes.
El experto independiente también destacó diversas áreas del marco legal de Chile que necesitan una reforma urgente, incluyendo las regulaciones sobre la autorización de reuniones pacíficas.