Las autoridades locales prohibieron que se dejen ofrendas de flores reales para evitar que el agua para mantenerlas sea lugar de proliferación del mosquito que propaga el virus junto al del dengue y chikungunya.
Según reveló la Organización Panamericana de la Salud (OPS) las flores artificiales son las únicas que permiten las autoridades para evitar criaderos del mosquito Aedes, el que puede transmitir zika, dengue y chikungunya.
Desde que el 5 de febrero Puerto Rico declaró la emergencia de salud pública para combatir el zika, las autoridades comenzaron a intensificar sus acciones para eliminar los criaderos de mosquitos, lo que se reproducen en cualquier recipiente que puede acumular agua, entre ellos, los floreros o envases en desuso que existen en los 78 cementerios municipales y 32 privados que hay en la isla.
Las autoridades comenzaron a intensificar sus acciones para eliminar los criaderos de mosquitos, lo que se reproducen en cualquier recipiente que puede acumular agua, entre ellos, los floreros o envases en desuso que existen en los 78 cementerios municipales y 32 privados que hay en la isla.
Exigir que todas las flores sean artificiales, sin embargo, es sólo una solución parcial. A diferencia de las flores de verdad, las artificiales no necesitan ser regadas. Pero los floreros y macetas que se utilizan deben estar llenos de tierra o piedras para evitar que acumulen agua.
«Estamos dándole énfasis a los cementerios porque la gente pone flores artificiales en envases sin tierra y sin piedras que pueden recaudar agua de lluvia y convertirse en uno de los principales focos de propagación de mosquitos», explicó José Luis Dalmau, presidente de la Comisión de Salud del Senado de Puerto Rico, donde los floreros y las lluvias son moneda corriente.
En la isla, los cementerios, como el municipal de Humacao, están dentro de los pueblos y los mosquitos que nacen allí pueden volar los pocos metros que los separan de las viviendas. «Acá la mayoría de las personas llevan más de cien años enterradas y muchos ya no tienen familia, así que tenemos que encargamos de los tiestos y de mantener y proteger de la lluvia las tumbas que están rotas», contó José Baéz, director de la Oficina de Manejo de Emergencias de Humacao.
Las autoridades también están fumigando los cementerios y tratando con larvicidas los recipientes que acumulan agua para matar las larvas del mosquito antes de que nazcan.
El video de la OPS sobre la campaña de prevención del dengue y zika en Puerto Rico: