Anita y Mirna Cesario llevan adelante un maravilloso trabajo solidario, a fuerza de empuje, convicción y amor. Su ayuda a muchos rincones de la Argentina, superando las adversidades climáticas y los obstáculos humanos.
Esta es una historia de solidaridad, contada bien en primera persona. Es protagonizada por madre e hija. Una con sus 80 y tantos años, la otra con sus más de 50. Conocieron el voluntariado trabajando para una organización internacional. Hasta que un día se dijeron, ¿y por qué nosotras solas no?
Mirna no vive de este proyecto. Rebusca el mango por donde puede. Moneda que junta, moneda que destina a su proyecto solidario. Pero la mejor paga es la que reciben por la ayuda que llevan a muchos rincones de la Argentina.
El trabajo solidario tiene implicancias políticas. Aunque no lo sepan, muchos de los que hacen tareas desinteresadas por los otros fastidian a la política. Muchas veces llevan adelante obras que los gobiernos, por distintas razones, no realizan. Al proyecto que Mirna y Anita Cesario encabezan le pasó concretamente en la provincia de Formosa. La mezquindad y el recelo las terminaron echando.
Sin embargo, ¿hay imposibles cuando existe un corazón que late solidariamente? Esta es la pregunta que uno se hace ante el trabajo inmensamente generoso de estas valientes y generosas mujeres, una labor que llega hasta las necesidades de tantísimas escuelas del interior argentino con reales carencias.
Los invito a conocer la historia de Sumando Solidaridad, como les decía, una historia bien en primera persona.
2 Comentarios
MUCHAS GRACIAS DIEGO!!! Por fin tengo el audio y lo pude compartir en Facebook , Dios quiera se sume mas gente abrazo grande Anita y Mirna Cesario Escuelas Albergues de Frontera
Querida Mirna, un placer por ayudar a difundir su gran trabajo!!