Durante 2016, la tasa de donantes de órganos por millón de habitantes disminuyó hasta su nivel más bajo de la última década, de acuerdo a los números oficiales del INCUCAI.
Mientras una larga lista de pacientes en espera aguardan recibir algún órgano, se conocieron datos finales del año 2016 que muestran que la tasa de donantes de órganos por millón de habitantes disminuyó en 2016 hasta su nivel más bajo de la última década (11,81 versus 12,35 en 2007). Los números son del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai). La caída de donantes se tradujo en menos procedimientos y, como consecuencia, menos trasplantes.
Durante el año pasado se realizaron 1.694 trasplantes de órganos y 938 de córneas; mientras que en 2015 fueron 1.773 y 1.118, respectivamente. Hoy hay 8.137 pacientes en lista de espera.
“La procuración en los últimos años ha entrado en una meseta. El año pasado incluso hubo una caída. Hay preocupación porque mientras tanto las listas de espera crecen”, explicó por su parte Alejandro Bertolotti, jefe de Trasplantes del Hospital Universitario Fundación Favaloro.
Múltiples causas
Son varios los motivos que explican la baja de la cantidad de trasplantes de órganos en la Argentina. En primer lugar, los especialistas hablan de efectos del cambio de gestión con la llegada de Mauricio Macri al gobierno. Aunque con argumentos para el debate, señalan que las políticas implementadas por la nueva administración no colocaron a los trasplantes entre las prioridades del sistema de salud.
Otro de los factores es la falta de formación sobre trasplantes por parte de los equipos médicos. Aunque la capacitación es constante, aún falta internalizar la donación de órganos como parte de los procesos médicos que, aún después de la muerte de un paciente, deben continuar activos, en este caso, para salvar otras vidas con los órganos del paciente fallecido.
Por último, el poco conocimiento sobre el tema que tiene la sociedad también influye en la caída en la cantidad de trasplantes en la Argentina. La falta de campañas públicas es visible desde hace años y apenas si los ciudadanos tomamos contacto sobre la concientización en la materia cuando nos vemos directa o indirectamente involucrado en una situación de enfermedad e internación o bien cuando vemos mesas callejeras (más bien pocas) o las que se instalan en los centros de votación, en tiempos de elecciones generales, cada dos años.
Los caminos para tener más donantes
Uno de los pilares fundamentales para tener más donaciones es comunicar la necesidad. Como señalan los especialistas, esta comunicación debe ser «adecuada, rápida y constante», algo que en la Argentina prácticamente no vemos.
También es necesario dar certidumbre a aquellas personas que, directa o indirectamente, se ven vinculadas al sistema de detección de donantes y la asignación de sus órganos. En ese sentido, el INCUCAI viene trabajando sobre la difusión de sus prácticas entre los médicos y en la población en general. En el mismo sentido, también se hace necesario que no existan sospechas sobre la accesibilidad y equidad en la asignación de órganos.
Un dato para tener presente es que, de todos los procesos de donación iniciados, casi el 50% no finaliza porque en la entrevista a la familia del paciente ésta no da autorización.
El exitoso caso de España
La Argentina tiene un largo camino por recorrer y, por qué no, ejemplos que pueden guiar esta tarea. Sin dudas, el más conocido y reconocido es el caso de España.
En 2016, ese país volvió a batir el récord de donaciones de órganos y de trasplantes, con 43 donaciones por millón de habitantes y cerca de 5.000 trasplantes. Según la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) española, ningún país consiguió estas cifras hasta el momento.
Según el director de la ONT, Rafael Matesanz, el logro del país en materia de donaciones se viene dado, entre otros motivos, por su política oficial de donaciones, especialmente por sus nuevas directivas sobre trasplante de corazón y las donaciones en los servicios de urgencia.
