La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) dio a conocer un informe en el que advirtió sobre las deficiencias en la implementación de los derechos sociales y las brechas de desigualdad en la región.
El documento señala que, desde 2000 y hasta hace pocos años, la región venía experimentando una reducción considerable de la pobreza.
Sin embargo, datos analizados en 2015 y 2016 revelan un incremento en los niveles generales, principalmente por la influencia de países con un gran volumen de población o con grandes aumentos de ese indicador.
El informe precisa que «la desigualdad de ingresos, si bien sigue siendo una de las más altas del mundo, «continuó mostrando una tendencia a la disminución, aunque menos intensa en el último periodo, y pocos países registran un incremento».
El organismo de la ONU destaca que los programas de transferencias condicionadas constituyen uno de los mecanismos de protección social más presentes en la región y «han desempeñado un papel destacado en la mencionada disminución de la pobreza».
Los países que redujeron la pobreza realizaron reformas en los sistemas de salud, pensiones y educación, y puso de manifiesto los programas de protección social en esas áreas.
Respecto a los derechos y necesidades de los niños, adolescentes y jóvenes, los niveles de conclusión de la educación secundaria aún son bajos entre niños y adolescentes, y solo una minoría logra seguir estudios superiores.
Además, en América Latina persiste la marginación laboral entre adolescentes y jóvenes cuyas tasas de desempleo son mucho mayores que en otras edades, y la violencia sigue siendo una gran preocupación, de la que no hay signos de descenso.
El informe remarcó que «aún restan enormes desafíos porque la fecundidad adolescente de la región sigue siendo comparativamente alta a escala mundial, muy desigual y no deseada por la mayoría de adolescentes que se embarazan».
En relación a la población adulta mayor, una gran parte no tiene acceso a pensiones de vejez que les garanticen protección y la cobertura de seguridad social de la población ocupada es muy desigual.
Sobre la salud sexual de la población en general, el informe señaló que la planificación familiar mejoró y se logró eliminar casi totalmente la transmisión del VIH/sida de madre a hijo.
Respecto a la igualdad de género, señaló el acoso y la violencia política que sufren las mujeres candidatas a cargos públicos, así como las dificultades de acceso a la financiación y la cultura contra la paridad en los partidos políticos.
Asimismo, persisten las desigualdades étnicas y en algunos países siguen siendo profundas especialmente contra mujeres, jóvenes y niños indígenas.
Además, de acuerdo al informe de la Cepal se observan altos niveles de tuberculosis y mortalidad materna con enfermedades crónicas y degenerativas.
Finalmente, el organismo de Naciones Unidas exhortó a la región a trabajar en la atención de los problemas que sufren los migrantes regionales, quienes registran problemas de inserción en el destino y en la reinserción en el retorno.