Un viaje por la inclusión digital de las personas con discapacidad
por Diego Corbalán
La cuestión de los inmigrantes no es nueva. Desde hace varias generaciones, hablamos de la inmigración como un desafío humano de gran impacto humano. Moverse de un lado al otro es, sin dudas, un enorme esfuerzo en todo sentido.
Ahora bien: el migrar hoy tiene además otra dimensión. Es que los saltos tecnológicos, especialmente los relacionados con la conectividad son tan grandes, que millones de personas quedaron de un lado del gran muro tecnológico que todos días crece un poco más.
Quedarse de un lado de esa pared no es simplemente quedar en el pasado. No poder sortear ese muro es directamente no poder acceder al futuro.
Esa imposibilidad de poder acceder a las nuevas tecnologías afecta a las generaciones más grandes. Pero nuestros adultos mayores no son los únicos que pagan las consecuencias. Muchos otros también pierden la oportunidad de una inclusión digital.
Las personas con discapacidad también padecen esa grieta tecnológica. Cruzar esta barrera no es fácil: se necesita ayuda. Y en este punto aparece la institución de la que vamos a hablar.
Se trata de Inmigrantes Digitales. Como ellos mismos se presentan, Inmigrantes digitales es una ONG que trabaja generando un doble impacto. «Promovemos la reducción de la brecha digital, capacitando a las personas que aún no hacen pleno uso de la tecnología»
«Creamos oportunidades económicas para las personas con discapacidad que son nuestro staff de profesores».
Charlé con Verónica Capurro, Director Ejecutiva de Inmigrantes Digitales. También se sumó a la charla Agustín Aleo, un profe que se prendió al desafío de enseñar a otros a embarcarse en la aventura de hacerse de las herramientas de la tecnología del presente.
La inclusión digital es el objetivo. Y la promueven articulando con el sector público y privado, buscando articular políticas que trasciendan el voluntarismo.