Son nueve los miembros de la organización internacional de ayuda humanitaria que murieron durante el bombardeo al hospital en el que atienden heridos. Hay unas 30 personas desaparecidas tras el ataque.
Nueve miembros de Médicos Sin Fronteras (MSF) murieron al ser bombardeado un hospital en la ciudad de Kunduz (Afganistán) y otras 30 personas permanecen desaparecidas, informó la ONG en un comunicado.
Medios estadounidenses citaron a fuentes militares según las cuales podría haberse tratado de «daños colaterales» en un ataque de la aviación estadounidense.
El ataque se produjo en momentos en los que las fuerzas de seguridad afganas recuperaron el control total de la norteña ciudad de Kunduz con apoyo aéreo de Estados Unidos, después de que ésta hubiese sido tomada por los talibanes el pasado lunes.
«Estamos consternados por el ataque, la muerte de nuestro personal y el gran daño que ello supone para la sanidad en Kunduz. Todavía no tenemos cifras finales de bajas. Nuestro equipo médico está ofreciendo primeros auxilios y tratando a los heridos», indicó el director de operaciones de MSF, Bart Janssens.
«Urgimos a todas las partes a respetar la seguridad de nuestras instalaciones y personal de sanidad», añadió Janssens.
Estados Unidos reconoció el ataque
Estados Unidos reconoció hoy que ha podido producir «daño colateral» en una instalación médica en un bombardeo en Kunduz, en el norte de Afganistán, y dijo que investiga el incidente, mientras Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció que varios de sus miembros murieron en el ataque.
El portavoz de las tropas estadounidenses en Afganistán, el coronel Brian Tribus, informó a Efe de que hubo un «ataque aéreo en Kunduz a las 2.15 hora local (21.45 GMT del viernes) contra individuos amenazando al contingente».
«El ataque puede haber producido daño colateral a una instalación médica cercana. El incidente está bajo investigación», indicó
Por su parte, el Gobierno afgano confirmó hoy que las fuerzas estadounidenses bombardearon esta madrugada un hospital.
Condena de los talibanes
Los talibanes condenaron «enérgicamente» el bombardeo de un hospital de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la ciudad afgana de Kunduz (norte) y acusaron a Estados Unidos de «martirizar» al personal médico y a los pacientes del centro.
«Anoche, las fuerzas americanas bombardearon un hospital civil en la ciudad de Kunduz, en el que médicos, enfermeras y pacientes resultaron martirizados y heridos», afirmó el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, en un comunicado.
Según el portavoz, «este crimen» se produjo cuando no había ningún insurgente en el interior del centro médico, «ya que la situación de conflicto no permite a ninguno de nuestros guerreros ser hospitalizados en él».
Mujahid acusó a la agencia de inteligencia afgana de haber proporcionado información falsa a EEUU para bombardear el hospital en Kunduz, ciudad estratégica que desde el lunes es objeto de combates entre los talibanes y las fuerzas afganas, que cuentan con apoyo aéreo estadounidense